Hoy os traemos una idea para una merienda buenísima: un pudding de mango y semillas de chía.
El mango es una fruta jugosa muy rica en magnesio y en vitaminas A y C, que ayudan al organismo a luchar contra los radicales libres. Además, la vitamina A tiene una acción muy beneficiosa en la piel, la vista, el cabello, las mucosas, los huesos y el sistema inmunológico. Es una fruta antioxidante y anticancerígena. También por su contenido en vitamina C ayuda en la absorción de hierro, la formación de glóbulos rojos y colágeno. Y por si fuera poco, nos ayuda con la digestión, debido a su contenido de magnesio y fibra.
Les semillas de chía son muy consumidas actualmente por sus numerosos beneficios. Están llenas de vitaminas y minerales. Tienen mucho calcio, buenísimo para los huesos; antioxidantes, hierro, fibra y potasio. Aportan por lo tanto mucha energía y son saciantes, por lo que resultan perfectas para personas que estén siguiendo algún tipo de dieta. Es un alimento 10.
Esta receta es muy fácil, la puedes hacer en 10 minutos y está buenísima.
Necesitas:
– 1 mango natural
– 1 vaso de agua
– 1 vaso de leche
– 2 cucharadas de semillas de chía
– un puñadito de nueces de macadamia
¿Cómo preparamos la mezcla?
– Bate el mango con el vaso de agua
– Añade la leche a las semillas de chía y deja reposar 20 minutos
– Reparte la mezcla del mango y el agua en dos vasos de agua, añade las semillas de chía con la leche (la textura será más densa) y ponle las nueces de macadamia por encima.
Un postre perfecto. Para desayunar, merendar o sacar después de cualquier comida o cena.
Bon apetit!